Violentas ilustraciones eróticas retratan lo primitivo de la feminidad

Como una manera de lidiar con un rompimiento amoroso a la edad de 18, Heather Benjamin se volteó a la ilustración. Creando dibujos personales y oscuros que narraban su viaje a través del desamor y todo lo que esto conlleva. Cuadernos y cuadernos llenos de estas imágenes empezaron a apilarse por lo que decidió compilarlos en su primera revista, a la que llamó "Sad People Sex". Con fotocopias de dibujos en blanco y negro de gente llorando y cogiendo, la revista de Benjamin describe la combinación de estas dos actividades como una metáfora de su vida en ese tiempo. A partir de ahí, el estilo íntimo que desarrolló ha estado presente en todo su trabajo, expresándolo en revistas, libros, ilustraciones y pinturas.

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Parte clave de la práctica artística de Benjamin es la expresión de una experiencia vivida, algo que juega un papel importante en sus representaciones oscuras, absurdas y eróticas de la sexualidad femenina. Su retratos de la femineidad no son para que muchas personas se sientan identificadas, sino algo más autobiográfico. Afirma que usa la ilustración como una herramienta, ayudando a articular las partes más complejas de ella misma. "Mi razonamiento para representar a las mujeres en la manera en que lo hago, a través del espectro de sentimientos y estados del ser y niveles de auto-aceptación o atracción sexual, siempre tiene que ver con la manera en la que me siento; en mi propia piel y mente, como una mujer," Benjamin cuenta a Creators. "Aunque mis sentimientos conmigo misma cambian todo el día, es constante el sentimiento de sentirme fea y bonita, amarme y odiarme, sintiéndome en paz y ansiosa, traumada y liberal, sexy y zen y como un animal –a veces algo bueno, y a veces malo. Entonces mi trabajo es sobre estas yuxtaposiciones, tratando de lidiar con ellas."

Portada de "The Collapsing Woman"

Los dibujos de Benjamin son caóticos pero con un punto, un conjunto de colores primarios y líneas que combinadas crean bocetos de personajes específicos. Aunque visualmente expresados con abandono, los mensajes de cada uno son claros, expresando momentos de dolor, humor, y placer. Estéticamente estas imágenes parecen tener una fuerte conexión con lo místico, porque las mujeres parecen enfocarse en tener algo mágico o dones de ese estilo. Esta conexión entre el trabajo de Benjamin y los aspectos sobrenaturales es un elemento que permaneció desde su inicio como artista, cuando la imagen y el mensaje de algo místico era una influencia directa. "No me veo haciendo las investigaciones que solía hacer, lo mágico ya no llama mi atención como antes. Si algo despierta mi interés lo investigaré, pero ya no uso la simbología de la manera en que lo hacía cuando era adolescente," explica.

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Así como Benjamin ha madurado como artista, sus inclinaciones a referencias en su trabajo han logrado una honestidad completa. Expresando los aspectos básicos de la humanidad, como el sexo y la muerte con franqueza absoluta, no sólo es una manera de darle voz a sus experiencias sino también una forma de activismo. "Creo que es importante hacerlo grotesco, o al menos los aspectos pictóricos del sexo y la sexualidad que se muestran, y abrir más el diálogo sobre esas cosas sin tabú," comenta. El trabajo de Benjamin es una respuesta al mundo en el que los medios populares normalmente ocultan la sexualidad, representándola en una manera que promueva la vergüenza y la culpa.

"Especialmente a las mujeres se les da una fórmula a la que deben acceder para poder sentirse sexualmente deseable, cuando hay otras maneras más bonitas, diferentes y realistas. Es importante porque hará nuestras relaciones íntimas más fuertes y honestas; podemos ser abiertas sobre las cosas como son, en vez de estar preocupadas por los tabús," dice Benjamin. "Y esto nos hará sentir menos solas cuando experimentemos aspectos menos digeribles sobre nuestros cuerpos y sexualidad y sintamos que estemos bien con ellos, hay algo mal con nosotras, somos diferentes, la gente pensaría que somos grotescas o poco atractivas. Y la lista sigue, siento que no puedo exagerar lo importante que creo que es exponer todo esto." El folklor nos dice que el trabajo de una bruja es debilitar el orden social y religioso con su magia –Benjamin hace lo mismo usando creaturas  similares a una bruja en sus ilustraciones como conducto. Siguiendo con el proyecto, continuará pintando estos bocetos en formatos grandes, medianos y pequeños para crear convenciones diferentes sobre la sexualidad.

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El trabajo de Heather Benjamin está a la venta aquí y estará expuesto este otoño en MOMA PS1 durante la Feria del Libro de Arte de Nueva York.

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