El que diga que la escena artística en México está muerta, sin innovación o falta de algo, está en un error, y nuestros artistas urbanos son la viva prueba de ello. Dhear (Jesús Benítez), Norte, Smithe, Saner, Jorge Tellaeche, solo por mencionar algunos, forman parte de esta generación relativamente nueva que ha llevado el nombre del arte mexicano de nuevo al lugar que merece, con posición y reconocimiento mundial.
Publicidad
Ahora, en una búsqueda por documentar y celebrar el muralismo y técnica urbana en México, la periodista Cynthia Arvide pasó los últimos años, compilando, entrevistando y retratando a los 20 artistas que actualmente son exponentes del movimiento en México y que tienen una propuesta única en su tipo. El libro titulado Muros Somos, actualmente se encuentra en su fase de fondeo y todos pueden ayudar para traer esta joya del arte contemporáneo a la vida, en Kickstarter.
Platicamos con Cynthia Arvide sobre este fascinante proyecto, el estado del arte urbano en México y su inspiración para lograrlo, puedes leer la entrevista, abajo.¿Cómo fue el proceso de selección de artistas?CA - Comencé con un par de criterios: que sea mexicano y que su especialidad sea el formato de pintura mural. Hice una primera lista de los artistas que estaban dedicados plenamente a ello, que estaban más activos y tuvieran también un poco de trayectoria (presencia en festivales y exposiciones, por ejemplo).Con el tiempo, al seguir las noticias de arte urbano, platicar con los propios artistas, galeristas y gestores de arte, fui confirmando y ajustando mi selección. Hay una cantidad impresionante de talento en todo el país y creo que hay mucho por descubrir pero desde el inicio pensé que era mejor no intentar abarcar todo, sobre todo al ser un movimiento que está cambiando constantemente, así que lo más difícil fue determinar 20 espacios en el libro y tratar de mostrar, a través de ellos, una vista panorámica de las diversas propuestas de arte urbano mexicano.
Publicidad
¿Cómo surge el proyecto?Hace cuatro años me pregunté qué estaba pasando con la escena de arte urbano en México y realicé un reportaje titulado "Los nuevos muralistas mexicanos" que se publicó en la revista Domingo de El Universal. Recuerdo que el día que hice las entrevistas y vi las fotos que tomó Federico Gama de Alonso Delgadillo, antes conocido como "El Norteño", y de sus colegas de Baja California, Rod Villa y Fernando Corona, regresé a casa y no podía dejar de pensar en que alguien debía hacer un libro sobre nuestros artistas nacionales.En mi investigación no encontré libros publicados en México que informaran sobre ellos aunque sí hay varios libros de otros países que los incluyen en sus antologías. Hacer este libro se convirtió en mi obsesión y me ha permitido vivir lo que más me apasiona: ver arte urbano y escribir sobre eso.
Mural de Norteño en La Paz.
Fotografía por La Cifra Editorial.
Más allá de murales comisionados y con permiso, ¿por qué el arte urbano puede ser catalogado como arte y no como vandalismo?Para mí es muy claro que un acto de vandalismo nace del egoísmo y pretende solamente romper o destruir algo. En cambio, si una intervención en la calle, incluso hecha de manera ilegal, nace de una intención de crear, busca hacer una propuesta o tiene la intención de aportar algo, ya sea hacerte sentir, reflexionar, contarte una historia o simplemente sorprenderte, es arte; es decir, cuando la intención es de sumar en lugar de restar, eso es arte.
Publicidad
¿Cómo crees que ha sido la evolución del arte urbano en México en tiempos recientes?El arte urbano en México está desarrollándose a una velocidad impresionante, sobre todo los últimos cinco años. Además de que hay cada vez más personas haciendo arte en la calle, cada año surge un nuevo festival, se establecen nuevas organizaciones dedicadas a promover este tipo de arte, hay medios especializados y más cobertura en medios convencionales. Es sorprendente la cantidad de usuarios en redes sociales que están a documentando las piezas y siguiendo a los artistas. Ciertas calles y barrios en varias ciudades del país se han vuelto zonas de exposición al aire libre. También sucede, víctima de su éxito y como ha pasado en otros países, que la publicidad va ganando de nuevo y regresa a comerse de alguna manera a esta expresión que, en sus orígenes, era libre de atender fines comerciales.
Mural de Eva Bracamontes en La Paz.
¿Habías intentado hacer el libro previamente de las herramientas para fundar proyectos?¡Sí! Ingenuamente pensaba que al tener el libro terminado, lo más difícil sería encontrar una editorial que tomara el proyecto y que entonces ya estaría todo mágicamente encaminado. Pero me encontré con que es mucho más complicado. Editoriales pequeñas tanto grandes estaban interesadas en ayudarme a concretar mi proyecto pero no tenían los fondos para llevarlo a cabo de inmediato. He pasado por una larga y tortuosa búsqueda de recursos por las vías 'tradicionales' como pedir apoyos gubernamentales a proyectos de cultura, patrocinios de marcas globales, buscar varios mecenas, etc. Por fin decidí buscar los fondos a través de esta plataforma de fondeo colectivo que ha dado vida a cientos de proyectos culturales en el mundo. Estoy asombrada de la cantidad de personas a las que les ha gustado mi proyecto y lo están apoyando. Al final, la solidaridad de la gente es lo que podría permitirme realizar este proyecto y eso me encanta.
Al inscribirte en la newsletter de VICE, aceptas recibir comunicaciones electrónicas de VICE que en ocasiones pueden contener publicidad o contenido patrocinado.
