¡Cayó el Baloto! Canciones para fantasear con la lotería

​Yo también he soñado con ser Charlie el de la fábrica de chocolates. No suelo comprar el Baloto, pero cuando lo hago siempre tengo la sensación que, contrario aquellos compradores compulsivos de lotería, tendré la suerte de tener en mis manos el billete dorado a la gloria, y ya del otro lado, botar este hijuemadre trabajo, darle una buena plata a mis cuchos e irme lejos a traquetear de lo lindo. Así de simple, como si la suerte haya dado señales en mi vida de regalarme este tipo de cosas, como si me lo mereciera.

Pero hay una verdad. Sé que la mayoría, no tendría esa manoseada humildad para ganarse la confianza de ese tal Wonka para que le regale su gran fábrica llena de enanos esclavizados. Seguro la materia gris le sería reemplazada por fajos de billetes de $50.000. Serían una bestias. Una completa porquería, pero como culpar a tal suertudo siendo tan arrancados en la vida. Y, para explicarlo con plastilina, está esta lista. Para narrar los pasos que usted  debe seguir para ser un héroe de la ganancia ocasional.

***

Mal contado, está ese chiste de aquel cucho que soñaba con ganarse la lotería. Semana a semana miraba el periódico para ver los números. Se decepcionaba, lo cerraba y seguía en su pobreza y destino infame. El rollo, es que el tipo nunca comparaba el billete. Para ganarse esa joda hay que comprarla. Hágase cargo de su vida ¡No sea vago! ahorre un par de polas y espere a ver si la suerte le llega sin tener que hacer ni mierda. Seamos honestos, eso de trabajar no es la bendición que dicen que es los papás.

​Cómo no incluir al Cacique de La Junta. Es que sí uno ya tiene todo ese billete "antes de morir es mejor aprovechar", porque ni certeza de no estirar la pata tenemos con la lotería. Y después se acaba la vida de este cuerpo humano y ¿qué? ¿qué se hace con lo guardado? ¡No joda! pa' que dejar a los herederos peleando. Si le cae la lotería ¡gástela hijuepuerca!, traquetée, dese gusto, ese cuento chimbo de que va a invertir la ganancia en finca raíz y en obras de beneficencia no se lo cree ni Sor Juana Inés de la Cruz.

Eso sí, sea generoso con los suyos. Ni s ele ocurra dejar a los cuchos fuera de la colada, esos manes ya han hecho de todo por usted, viejo bellaco. También guarde dinero para sus hijos (seguro va a meter las patas por andar borracho), para sus abuelos, para sus tías. Y bueno, está bien, invierta, pero invierta lo que diez colombianos no gastan en diez años. Viva bien pimpiado como Raymond Pozo & Miguel Céspedes que todos los que lo odiaron por pelado van a volver. No los rechace. Póngales sus billetes en la cara.

​

​Eso sí, sepa que envidias va a despertar, y le va a tocar curtirse. Esté listo "Pa`las que sea", como el viejo Jimmy. Su guaro y su fiesta defiéndalas como las tenga que defender. Y no cantando "Fight For Your Right (To Party)​", esta mierda es en colombiano. No afloje el gatillo, hermano, que detrás de usted van una partida que carroñeros.​ Esta vaina es de mansiones como trincheras. Cuídese que seguro ya usted es una mierda, lo único por lo que tiene amigos y mujeres es por su billete.

​

Pero téngala clara, nunca se olvide quién es usted: ¡un tipo tapado en oro jueputa! Tenga siempre como norte toda esa alcurnia que le permitirá ser parte del "Gucci Boys Club". Párele bolas a Arcangel, para que la gente sepa con quién está hablando: "¿Usted sabe quién soy? el de los tickets y las perras, montados a ciento y pico en el panamera​"; o "Parqueao' ya nadie frontea' con el nene. Ustedes sueñan tener lo que papi Arca tiene"; o "Yo soy el Play Station 3 y ustedes Super Nintendo; o "Yo soy el mejor, pregúntale a tu novia". ¡Eso! sea un pirobo patético, que usted es el rey! Deje que la plata le envenene ese coco y que lo pudra lo poquito de humano que le queda.

​Obvio esa energía que tiene El Cacique se agotará con el tiempo. Sino mire cómo terminó nuestro rockstar colombiano. O también el miedo a morir en una batalla por dárselas del parado. Así que si sobrevive a la etapa de euforia y volverse pedazos, seguro se encontrará con la gran incertidumbre: ¿en qué putas me gasto toda esta plata? Pues Sinergia le tiene un par de ideas: gástele helado a todo el mundo, reparta acciones de la bolsa, compre equipos de fútbol. Compre opiniones, déle circo al pueblo, postúlese como presidente. Ser mafioso es una actitud, y no sería el primer mandatario de nuestro país en tenerla.

​

Por tarado lo va a perder todo. Todo es todo. No se preocupe, normal. Ningún ser humano es capaz de asumir algo por encima de sí. Eso sí, guarde su dignidad. No diga que volvió a vivir con su mamá porque no tenía con qué pagar su mansión, sino porque descubrió que lo importante es ser un hombre de familia. No diga que come pasta con atún o arroz con huevo todos los días porque no tiene un peso, sino porque entendió el valor de ser un tipo sencillo. No diga que volvió a agarrar bus, o irse a pie porque ni tiene para el pasaje, porque le tocó dar el carro para pagar deudas y no le dieran piso. Diga que le preocupa el medio ambiente y que andar solo en una nave es ser muy bruto. Póngales "Money", un golpe de autoridad a su austeridad.

​

Pero bueno. Nada de esto va a pasar. Queridos lectores, me atrevería a decir que ninguno de ustedes se va a ganar el Baloto, ni va a tener la oportunidad de ser una porquería. O una porquería sí, pero peladooooooo como rodilla de casquivana. Pero bueno, los mejores deseos. Y que esta suerte de porquería cambie. Igual yo ni quería ser millonario.

​***

​