placer
Una guía ilustrada para dar placer sin penetración
En su libro 'Bliss Club', Jüne Plã habla de cómo la lengua, las manos y otras partes del cuerpo se pueden usar para dar placer.
La revolución virtual del sexo: talleres de goce y placer
Con la cámara prendida o apagada los talleres online de sexo presentan nuevas ventanas para hablar de masturbación, sexo anal, tantra y BDSM con desconocidos.
Algunos regalos que me dio el feminismo para pensar el amor
"Vivir el mundo como una mujer cada vez más feminista, soltera, que quiere amar y ser amada, desear y ser deseada, dar y recibir placer es estar permanentemente entre tensiones".
Todavía me calientan deseos que me avergüenzan
Como feminista, María del Mar Ramón piensa que "lo problemático no está en desear juegos que simulan violencia sino en que estos no se puedan dar siempre en escenarios consentidos".
Te presentamos el Automoblow: un robot succionador de penes para tu Tesla
Los fabricantes de Autoblow están de vuelta con un accesorio para darte placer mientras conduces en piloto automático.
El sexting seguro es tan necesario como el sexo seguro
Ten en cuenta estas recomendaciones para explorar otro lado de tu sexualidad y evitar ser víctima del acoso digital.
El orgasmo vaginal no existe, es una invención misógina
Las mujeres seguimos pensando que el orgasmo vaginal es más potente y mejor que el clitoriano por culpa de una invención machista de Freud.
La guía del ‘edging’, el arte de retrasar orgasmos especialmente intensos
Cuanto más aguantes, más intenso será el orgasmo.
¿Qué tan malo es que no siempre lave mis juguetes sexuales después de usarlos?
Es comprensible que no quieras ir a lavar tus juguetes inmediatamente después de llegar al orgasmo... pero el riesgo por no hacerlo es muy alto.
Que por favor nunca nada ni nadie nos succione el clítoris
Una reseña honesta del juguete sexual de moda que jamás han debido bautizar “succionador de clítoris”.
La ciencia dice que puedes evitar el bajón que da el MDMA
Un nuevo estudio sugiere que, si consumimos MDMA con un poco de cabeza, podemos evitar el clásico bajón existencial e incluso experimentar un subidón posterior.
Tomarse nudes es una práctica emancipatoria
Nuestros cuerpos no pueden ser motivo ni de vergüenza ni de castigo ni de chantaje. Nuestros cuerpos son una herramienta de placer. Y que se jodan.